JAMA Oftalmología
Jamie Enoch, MSc; Leanne McDonald, MSc; Lee Jones, PhD; Pete R.Jones, PhD; David P.Crabb, PhD
Importancia
A menudo se considera que la vista es el sentido más valioso por el público en general, pero hay datos empíricos limitados que lo respalden. Este estudio proporciona evidencia empírica de afirmaciones habituales hechas por profesionales, investigadores, y organismos de financiación de que la vista es el sentido más valorado.
Objetivo: Determinar qué sentidos son calificados como más valiosos por el público en general y cuantificar las actitudes hacia la pérdida de la vista y de la audición en particular.
Diseño, ajuste y participantes: Esta encuesta transversal en línea se realizó de marzo a abril de 2016 a través de una plataforma de investigación de mercado y recogió una muestra heterogénea de 250 adultos del Reino Unido de 22 a 80 años reclutados en marzo de 2016. Los datos fueron analizados de octubre a diciembre de 2018.
Principales resultados y medidas: Primero se pidió a los participantes clasificar los 5 sentidos tradicionales (vista, oído, tacto, olfato y gusto) más otros 3 sentidos (equilibrio, temperatura y dolor) en orden de más valioso (8) a menos valioso (1). A continuación, se investigó el miedo a perder la vista y la audición usando un ejercicio de equivalencia temporal. Los participantes eligieron entre 10 años sin vista/audición versus cantidades variadas de salud perfecta (de 0 a 10 años).
Resultados
De los 250 participantes, 141 (56.4%) eran mujeres y la edad media (DE) fue de 49.5 (14.6) años. Doscientos veinte participantes (88%) clasificaron la vista como su sentido más valioso (calificación media [DE], 7.8 [0.9]; 95% IC, 7.6-7.9). La audición se clasificó en segundo lugar (calificación media [DE], 6.2 [1.3]; 95% IC, 6.1-6.4) y el equilibrio en tercero (calificación media [DE], 4.9 [1.7]; 95% IC, 4.7-5.1). Los 3 se clasificaron por encima de los sentidos tradicionales del tacto, el gusto y el olfato (F₇ = 928.4; P <.001). El ejercicio de equivalencia temporal indicó que, en promedio, los participantes prefirieron 4.6 años (IC 95%, 4.2-5.0) de salud perfecta por encima de 10 años sin vista y 6.8 años (IC 95%, 6.5-7.2) de salud perfecta sobre 10 años sin audición (diferencia media entre la vista y la audición, 2.2 años; P <.001).
Conclusiones e importancia: En una encuesta transversal de adultos del Reino Unido del público en general, la vista fue el sentido más valorado, seguido de la audición. Estos resultados sugieren que las personas elegirían, en promedio, 4.6 años de salud perfecta por encima de 10 años de vida con pérdida completa de la vista, aunque se desconoce cómo esto se generaliza a otras partes del mundo.
Afiliaciones del autor: Departamento de Optometría y Ciencias Visuales, Facultad de Ciencias de la Salud de la Ciudad de la Universidad de Londres, Inglaterra.
Autor correspondiente: David P. Crabb, Dr, Departamento de Optometría y Ciencias Visuales, Universidad de Londres, Northampton Square, Londres, Londres EC2V OHB, Inglaterra (Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo..).
Una investigación en los Estados Unidos mostró que miembros del público clasifican la pérdida de la vista como una mayor preocupación que la pérdida de la memoria, la pérdida del habla/audición, o condiciones médicas crónicas, como el VIH/SIDA y enfermedades cardiacas.1 Del mismo modo, un estudio clínico longitudinal con pacientes experimentando pérdida sensorial mostró que la pérdida de la vista y del tacto causa las mayores disminuciones en la calidad de vida antes que la pérdida de la audición, del gusto o del olfato.2 Sin embargo, has donde sabemos, la importancia relativa de la vista comparada con otros sentidos no ha sido investigada sistemáticamente en la población general en un entorno no clínico. Por lo tanto, realizamos una encuesta para determinar qué sentidos son clasificados como más valiosos por una sección representativa del público y cuantificamos actitudes hacia la pérdida de la vista y de la audición en particular mediante un ejercicio de equivalencia temporal (TTO).
Métodos
Este estudio fue aprobado por el Comité de Ética de Investigación Científica de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad de Londres. Se obtuvo el consentimiento firmado por escrito de todos los participantes antes de la inscripción. Se proporcionó una encuesta en línea por una compañía independiente de investigación de mercado, FlexMR (FlexMRLtd), que fue contratada por el equipo de investigación específicamente para difundir la encuesta y recopilar las respuestas. FlexMR muestreó 250 adultos establecidos en el Reino Unido en marzo de 2016 (edad media [rango]: 50 años [22-80 años]; 141 mujeres [56.4%]). Los participantes se seleccionaron de un grupo de individuos residentes en Reino Unido que se había registrado previamente para recibir invitaciones a encuestas de FlexMR y que entraron a un sorteo como compensación. Se recogieron las características sociodemográficas de los participantes (tabla en el Suplemento). La encuesta estaba abierta a individuos que pudieran haber tenido una discapacidad sensorial ellos mismos o en su familia.
Este estudio adoptó una definición más amplia de los sentidos que los 5 sentidos “tradicionales” de Aristóteles, incluyendo también el equilibrio (equilibriocepción), dolor (nocicepción), y la temperatura (termocepción). Primero se les pidió a los participantes clasificar 8 sentidos (vista, audición, tacto, olfato, gusto, equilibrio, temperatura y dolor) en orden del más valioso (8) al menos valioso (1). Luego, se investigó el miedo a la pérdida de la vista y de la audición usando un ejercicio de equivalencia temporal (TTO).3 Los participantes eligieron entre 10 años sin vista / audición (vida A) y cantidades variables de salud perfecta en disminuciones de 1 año de 10 a 0 años (vida B). Esto permitió el cálculo del número de años sin vista o audición que un participante intercambiaría por salud perfecta durante un periodo de 10 años. Se analizaron las diferencias de años intercambiados entre los grupos usando la suma de rangos de Wilcoxon y las pruebas de Kruskal-Wallis. Los análisis estadísticos se llevaron a cabo usando R, versión 3.5 (Fundación R), y el valor estadístico se estableció en α = .05.